Ahora que recientemente MarketinLife ha cumplido diez años quiero reflexionar sobre lo que ha sido todo este periodo de tiempo, un periplo que me ha llevado a asesorar y trabajar con entidades de gran prestigio no sólo nacional sino también internacional y que me han permitido asumir retos para los que una mente con inquietudes debe estar convenientemente preparada.
Los cargos de directivo, en general, exigen de un nivel de preparación y experiencia que debe traducirse en una visión global e integral de lo que representa su responsabilidad dentro de una organización y la dirección de marketing y desarrollo de negocio no es una excepción.
Del mismo modo que un director de cine debe conocer muy bien todo lo que envuelve una producción para poder plasmar lo que desea de cada escena y de sus actores y que se debe traducir en nociones avanzadas sobre actuación, fotografía, iluminación, sonido, escenografía, expresión escrita, incluso maquillaje si me apuras, una persona que ostente el cargo de dirección de marketing y desarrollo de negocio debe saber tomar decisiones basadas en un profundo conocimiento sobre economía, tendencias sociales, política, materias legales, tecnología o de cualquier índole que pueda tener un impacto sobre la actividad de la organización para la que presta sus servicios.
Y digo deliberadamente dirección de marketing y de desarrollo de negocio porque para mi son actividades o disciplinas que necesariamente deben ir ligadas para poder obtener precisamente esa visión global de hacia donde evoluciona la economía y la sociedad y así adaptar toda la estructura de la compañía para la que trabaje a las nuevas exigencias del mercado y construir una oferta de productos y servicios que garantice la supervivencia a largo plazo de la empresa.
En su capacidad para identificar nuevas oportunidades y darles forma radica el verdadero valor de un profesional del marketing y desarrollo de negocio. Al igual que el director de cine, el profesional del marketing y desarrollo de negocio debe conocer todas las herramientas que tiene a su alcance pero no debe olvidar de que se trata de meros instrumentos y necesita comprender que su cometido es el de construir y dirigir una producción que lleve a su público objetivo a disfrutar de un espectáculo merecedor de una gran ovación y reconocimiento que, en términos empresariales, se traduce en un mayor consumo y fidelización hacia la marca que representa.
En mi opinión, por tanto, las ideas y la creatividad son rasgos que deben ser inherentes a cualquier profesional que ostente un cargo directivo en una compañía ya que dentro de muy poco, y en especial dentro del marketing y desarrollo de negocio, las tareas más cotidianas van a ser desarrolladas por soluciones tecnológicas basadas en inteligencia artificial y aprendizaje automático (machine learning), y lo que hará un directivo de marketing es encargar una serie de parametrizaciones que permitan ajustar esa solución tecnológica a las necesidades de la empresa para así orientar su oferta de productos y servicios hacia esas tendencias de mercado que han sido identificadas gracias a esa visión que debe atesorar.
Por ejemplo, un buen director de tecnología no es aquel que sólo domina todas las herramientas y plataformas que existen en el mercado sino el que además sabe interpretar qué es lo que necesitan en el área de negocio de la compañía para darle una respuesta en forma de solución tecnológica y permitir así trabajar de un modo eficiente.
Para que un buen directivo o asesor de marketing resulte de utilidad para una empresa, necesita aportar esa visión que lo hace único frente a los demás, ese resultado que en forma de nuevas ideas e iniciativas le permitan contribuir al desarrollo económico de la organización para la que presta todo su talento.
En una economía y una sociedad marcada por la digitalización, la robótica la inteligencia artificial y machine learning, cada vez más, el profesional del marketing y desarrollo de negocio debe permanecer en el plano estratégico y no descender al plano táctico y operativo ya que en ese sentido contará con el apoyo inestimable de las nuevas tecnologías. En cambio, analizar desde una perspectiva estratégica le va a permitir otorgar verdadero valor a su función y será ahí donde tendrá que marcar la diferencia para que todo ese valor añadido que posee se canalice adecuadamente hacia los diferentes ámbitos de la organización que están implicados en la gestión.
Los profesionales que trabajamos en el ámbito estratégico del marketing y desarrollo de negocio a menudo construimos verdaderos Frankenstein ya que escogemos ideas y soluciones de aquí y allí para combinarlas y crear un nuevo ser que en forma de plan nos ayude a obtener mejores resultados para las marcas y empresas a las que servimos.
Y eso es lo que espero haber hecho durante estos diez años que MarketinLife lleva en el mercado y lo que deseo hacer en el futuro porque he aprendido mucho asesorando a marcas de reconocido prestigio internacional pero sobre todo no he dejado de sentir interés por seguir aprendiendo y sobre todo por continuar observando a mi alrededor cómo todo mi entorno evoluciona y qué conclusiones puedo y debo sacar de todos esos cambios para poder aplicarlos convenientemente en todos los proyectos en los que estoy inmerso y, sobre todo, en los que están por llegar.
Quiero aprovechar esta entrada para agradecer a todas las personas y empresas que durante estos diez años han depositado su confianza en esa fuente de ideas que emana de mi conocimiento y experiencia. Fijo mi mirada en el futuro y espero poder seguir analizando todo lo que sucede a mi alrededor para interpretarlo adecuadamente y seguir siendo fiel a los principios por los que se debe regir cualquier profesional encargado de dirigir los designios de departamentos y empresas en general.
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